Trasfondo lucrativo al criminalizar las “terapias de conversión”.
Autor: Dr. Carlos Marx Barbosa Guzmàn.
Premio Estatal al Mèrito Jurìdico 2018.
Se ha generado una campaña de reformas, que CONTRADICEN los Pactos internacionales y lo contenido en la Constituciòn Federal.
En diversos Estados de la Repùblica Mexicana, se han aprobado reformas al Còdigo Penal, para agregar un artìculo donde se habla sobre las “terapias de conversión”, en el que criminaliza la orientación que los padres o tutores o inclusive algunos profesionistas (psicólogos y hasta sacerdotes) realicen sobre los infantes o adolescentes, lo cual entra en pugna con los previsto en los artìculos 1º, 4º, 5º, 8º y 133 de nuestra Carta Marga, asì como por lo establecido en la Declaraciòn Universal de los Derechos Humanos, en el Pacto Internacional de Derechos civiles y políticos, en la Convenciòn americana sobre derechos humanos y por los estipulado en el artìculo 5º de la CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO.
Y esto se debe a que en realidad, se pretende convertir a menores sanos en pacientes de por vida, ya que las empresas farmacèuticas comprobaron que se trata de un grande y millonario negocio, lo que alegra a los Paìses al recaudar impuestos por esa actividad lucrativa.
Asì es, porque en la última década el número de menores en el mundo, sobre todo niñas, que rechazan su cuerpo y deciden iniciar la transición a niños se ha incrementado en porcentajes de hasta 4,000%. Ante este fenómeno inaudito cabe preguntarse ¿cuáles son las razones que impulsan a esas menores sanas a convertirse en pacientes-consumidoras-clientes de la industria clínico-farmacéutica de por vida?.
Pero sobre todo, los datos ocultos como: ¿cuáles son las consecuencias físicas, psicológicas y económicas de esos tratamientos? Y, ¿por qué los medios de comunicación, empresas de todo ámbito y gobiernos de todo color celebran que se mediquen y legislan por vía de urgencia, para que inicien el proceso cuanto más jóvenes mejor, y sin encontrar ninguna traba alguna?
EL ORIGEN
Estados Unidos de Norte Amèrica, es la cuna del negocio clínico-farmacéutico de la Identidad de Género, negocio que se sustenta sobre la vulnerabilidad de los menores, y mayoritariamente de niñas que rechazan su cuerpo y quieren transicionar a niños.
Conocer los costos de las cirugías y los tratamientos hormonales es tan sencillo como consultar las listas de precios de las clínicas que las realizan y de las farmacéuticas que los comercializan.
Por ejemplo, el costo por una mastectomía oscila entre los $140,000.00 a $200,000.00, en función del tamaño del pecho a amputar, la cantidad de tejido sobrante, y la recolocación, o no, de los pezones.
La faloplastia se ubica entre los $450,000.00 a $600,000.00, dependiendo si se realiza desollando parte del muslo o del costado (procedimiento necesario para rellenar el neo-pene) y de si queremos que pueda simular estar erecto o no.
A las anteriores hay que añadir las cirugías de masculinización de las facciones y del cuerpo, que pueden alcanzar los $100,000.00.
En el caso de iniciar la transición siendo menor, es necesario administrar bloqueadores de la pubertad. La alternativa más utilizada para su administración son las inyecciones subcutáneas, cuyo coste ronda los $20,000.00.
También se puede optar por implantes subcutáneos como los de Supprelinla, que alcanzan los $810,000.00 o los de Vantas, más económicos y a la venta por unos $95,000.00.
Apuntar que los bloqueadores de la pubertad son medicamentos prescritos COPEPRIS no indica su uso para este propósito sino para otras enfermedades.
Los más utilizados son la Leuprolida y la Histrelina, creados para el tratamiento del cáncer de próstata, la endometriosis o la pubertad precoz.
También se utilizan como castrador químico para delincuetes sexuales reincidentes, pederastas y muchos países los administran a convictos por èstos delitos en sus cárceles.
Otra de las consecuencias de impedir el desarrollo pubertal es la atrofia genital, los órganos sexuales frenan su crecimiento y mantienen su aspecto y tamaño infantil, lo que deviene en muchos casos en la imposibilidad de tener una vida sexual plena.
En las transiciones de hombre a mujer, este infradesarrollo impide el uso del tejido del pene para la construcción de la pared neovaginal, lo que obliga a utilizar parte del colon del paciente, sometiéndolo a una operación mucho más costosa, arriesgada y dolorosa.
En el caso de las mujeres, la infertilidad es uno de los múltiples efectos secundarios de los tratamientos, lo que las convierte en potenciales consumidoras de otra rama del negocio clínico-farmacéutico.
Como protocolo estándar, las clìnicas aconsejan a sus pacientes extraer y congelar los óvulos antes de comenzar el proceso de transición.
Estos óvulos son congelados y conservados para darles un uso futuro, bien implantándolos en sus parejas, teniendo OTRO costo por eso, si estas fueran mujeres, o en ellas mismas, en caso de no haberse sometido a la extracción del útero.
Los precios del tratamiento de Fecundación In Vitro para ambos casos oscilan entre los $215,000.00 a $270,000.00.
Una vez que estas pacientes, menores de edad, deciden comenzar con la hormonación cruzada, deberán sustituir los bloqueadores de la pubertad por testosterona, como la que comercializa PFIZER.
Esto se debe a que el ejercicio de la patria potestad, restringe las diversas formas de adoctrinamiento mediático, y una forma de hacer a un lado la opinión de los padres o tutores es fomentar una campaña de marketing global para normalizar que la búsqueda de la identidad personal se consigue a través de las intervenciones quirúrgico-farmacéuticas, y las jóvenes a quienes van dirigidas son su nicho de mercado millonario, LO QUE REPRESENTA MAYOR CAPTACIÒN DE IMPUESTOS para el Gobierno, sin olvidar las dàdivas que previamente se han dado a muchos funcionarios y legisladores para que se apruebe casi de inmediato.
HIPOTECAR LA IDENTIDAD
Para que este negocio emergente funcione, no solo debe facilitarse la información de que se necesita algo que no se creía necesitar, sino la financiación para pagar aquello que nunca se pensó que valiera dinero: la propia identidad.
Para esas menores que sucumben a la presión mediática, hay disponibles múltiples métodos de financiación, como las tarjetas de crédito ex profeso con las que se pueden pagar los costosos procedimientos a plazos.
Pero ¿y si no pueden permitirse ningún tipo de financiación?
La agenda institucional para cubrir eso, es criminalizar la educación que los padres dan a sus hijos, asentándola en la ley penal, eso provocarà facilitar el adoctrinamiento de las empresas farmacéuticas a travès de movimientos que fomentan esa ideología, para luego impulsar dichas operaciones para reformar la ley de salud, y sea el Estado quien asuma esos gastos, pero financiados con NUESTROS IMPUESTOS, como se demostró en la iniciativa presentada por una Diputada Federal del PRD en el año 2019.
Sin importar que esos tratamientos tan caros, provoquen el desabasto de medicinas esenciales en las clìnicas pùblicas con tal de dar prioridad a adquirir los tratamientos de reasignación de sexo.
Aunque Estados Unidos de Norte Amèrica es el origen de este rentable negocio, muchos otros países cuentan con clínicas de reasignación de sexo de menores tanto privadas como públicas, y a ese punto se quiere llegar en Mèxico.
Este proyecto pone de manifiesto el incremento exponencial de las clínicas de reasignación de sexo en menores en el mundo, lo que reafirma su rentabilidad SIN IMPORTAR el DAÑO PSICOLÒGICO que dejen en la persona sometida a esos tratamientos.
Mientras a los padres, tutores o profesionistas han quedado advertidos de ser encarcelados si pretenden educar a sus hijos sobre el tema de su sexualidad, en cambio, a los que comercian la transiciòn sexual se les ha concedido mayor libertad de que lleven el adoctrinamiento mediante el contagio social provocado por la campaña de marketing global del mercado de las identidades, tal como se ha observado de fenómenos como mostrar el resultado de una mastectomía adolescente en TikTok.
Búsquedas en redes de adolescentes sobre «Top Surgery Recovery», «Gender Afirmation» o «Gender Dysphoria» dan una idea del grado de contagio social al que nos enfrentamos. Esas mismas redes son aprovechadas por cirujanos para promocionarse y ofrecer sus servicios.
Otro ejemplo del contagio se encentra en la plataforma de Crowdfunding GoFundMe, donde hay miles de campañas activas de adolescentes recaudando dinero para costear sus mastectomías, hormonas u operaciones de reasignación.
¿cuántas de esas menores, una vez mastectomizadas, tratadas con bloqueadores de la pubertad y testosterona se han arrepentido de su transición?
LA DETRANSICIÓN
Cada día aparecen nuevos testimonios de desistidoras y detransicionadas en todo el mundo, superando las 30 mil personas, algo tristemente esperado, dado el incremento en todo el mundo de transiciones.
¿a qué se debe este número tan elevado de arrepentimientos? ¿acaso hay una sobrediagnosticación?
La Terapia Afirmativa o cinta transportadora como la apodan los médicos y psicólogos que se oponen a ella, implica que la paciente auto-diagnostica su disforia, pero para impedir que el padre o tutor o el profesionistas le ayude, se ha convencido al legislador que eso se considera “terapia de conversión” que se penalizarà cualquier intento de indagar sobre las causas de su rechazo al propio cuerpo.
Eso es grave, porque la intención de las farmacéuticas es que no se le acabe su negocio, y con esas reformas los padres y tutores y profesionistas perderàn potestad en sus hijos o pacientes, quedando expuestos los infantes al adoctrinamiento de las empresas farmacéuticas.
NOTA IMPORTANTE: Los dueños de las empresas farmacèuticas NO permiten que sus hijos se sometan a procedimientos de conversión de sexo.
El prohibir que un profesionista indague las causas de la persona sobre rechazo de su cuerpo, tasa su derecho a ejercer su profesión. Entonces cabe preguntarse en qué otro campo de la medicina se permite que el paciente haga su propio diagnóstico y decida la administración de su tratamiento.
Bibliografía
Barboza Guzmán, Carlos Marx. Trasfondo lucrativo al criminalizar las “terapias de conversión”. México: CEAAMER, 2018. 6 hojas.