Santiago López, Janaí. Proyecto UCAM

PROYECTO UNACAM

El proyecto UNACAM (Unidad de Adiestramiento y Certificación de Aptitudes Medicas) es una iniciativa que persigue cubrir los requerimientos de aprendizaje los estudiantes de medicina.

Su objetivo es permitir que el estudiante de medicina sea capaz tanto de aprender de la experiencia como de tomar decisiones. La enseñanza-aprendizaje que busca este tipo de propuesta está centrada en el “saber hacer” y apoyado en la propuesta de “aprender mediante el uso de la tecnología digital” considerando a los simuladores como un “laboratorio virtual” donde el estudiante de medicina podrá lograr un aprendizaje por descubrimiento.

También se persigue crear ambientes ricos en situaciones que el estudiante de medicina debe explorar conjeturalmente, hasta llegar al conocimiento a partir de una experiencia clínica, creado sus propios modelos de pensamiento, sus propias interpretaciones con el mundo simulado para ser aplicadas posteriormente en el mundo real.

El proyecto UNACAM es el primer paso de un nuevo modelo educativo médico que empieza a surgir en México. Con el uso de la tecnología digital, los estudiantes de medicina tienen la oportunidad de convertirse en exploradores del conocimiento, descubriendo fascinantes contenidos mediante el uso de simuladores que abordan temáticas de forma universal, bajo un enfoque interdisciplinario. El modelo educativo que se pretende es uno en donde el estudiante de medicina, en una aula de clases, comparte con sus compañeros la experiencia y el conocimiento, y no solamente eso, comparte con el docente la adquisición de ese conocimiento, porque el mismo docente es parte del proceso de formación y estará aprendiendo en ese proceso. Los alumnos, estarán conectados en lo que sería una especie de red intrahospitalaria, mientras que el profesor, además de supervisar lo que cada uno de sus alumnos está viendo en torno al uso de simuladores, también podrá explicar pedagógicamente los contenidos educativos.

 

Factores no considerados

La integración del proyecto UNACAM  en la Escuela Superior de Medicina ha sido un proceso complejo y que ha encontrado un gran número de dificultades, algunas relacionadas con el profesor y otras relacionadas con la institución.

Entre el profesorado podríamos señalar aspectos tales como la falta de confianza, la falta de competencia o las actitudes negativas ante el cambio. La falta de confianza del profesorado es uno de los obstáculos más frecuentemente encontrado, podríamos asociar esta falta de confianza con la falta de capacidad percibida por los profesores para utilizar las nuevas tecnologías frente a alumnos que quizá saben más que ellos. La falta de confianza se ha asociado también con la falta de experiencia con el uso de simuladores. A nivel institucional muchos profesores no sólo no utilizan las tecnologías en sus aulas, sino que le atribuyen poca utilidad. Lo que implica que los profesores que no se consideran competentes en el uso de simuladores, no son entusiastas de los cambios y de su integración en la enseñanza, por lo que considero que, como toda tecnología en su uso, se requería de una capacitación previa del maestro para que este pudiera servir de multiplicador hacia sus alumnos y sobre todo en conocimiento de la existencia de los mismos simuladores.

Entre otras limitantes no consideradas encontramos factores como la falta de tiempo o las dificultades de acceso a los simuladores.

Frente a las clases tradicionales, la utilización de simuladores requiere más tiempo (para la planificación y organización), y no disponen de ese tiempo en horarios de clase sobrecargados. Así, para que la experiencia se exitosa con la UNACAM es importante llevar un programa o control en su aplicación ya que entre la teoría sobre el tema y llevarlo a la práctica con efectividad, requiere tiempo el cuál puede provocar no cumplirse o retrasarse en el programa de estudio.

Otro punto de gran importancia es que para obtener estimaciones más exactas y para minimizar la probabilidad de error se tienen que: (1) hacer un gran número de ensayos en cada simulación y (2) repetir toda la simulación un gran número de veces. Para problemas más complejos, un gran número de repeticiones puede requerir cantidades significativas de tiempo del simulador, cuando las sesiones programadas son solo de 50 minutos.

Por tanto se requiere de la utilización de más de un simulador ya que su uso es de recomendación individual.

Productos exitosos

El proyecto educativo UNACAM, mejora la motivación estudiantil de los jóvenes y enriquece el proceso de formación académica, además de que refuerza el papel educativo de los profesores en las aulas de clases, gracias a su amplio contenido pedagógico. «UNACAM no es un elemento externo al aula de clases, sino que actúa y forma parte del mismo salón escolar, lo que hace a las actividades académicas sean dinámicas y ofrece a los estudiantes de medicina herramientas más avanzadas y didácticas». Se aspira que UNACAM transforme la educación médica, convirtiendo a los estudiantes en médicos curiosos, creativos, investigadores y además reflexivos. Pero además de ser una poderosa herramienta educativa, UNACAM favorece la aptitud clínica en los estudiantes de medicina, debido a que los simuladores son elementos que promueven la capacidad del estudiante de medicina para llegar a la solución de problemas clínicos, situación difícil de realizar si el alumno se encuentra solo en el aula, ya  que permite que cada alumno, de acuerdo con sus capacidades, evolucione con ese elemento de interacción que tiene en la UNACAM, además de que refuerza sus competencias.

UNACAM ofrece muchas ventajas, más allá de las pedagógicas, y entre esas otras resalta la capacidad de enseñar a los alumnos a utilizar las tecnologías de información como instrumento para su auto-aprendizaje y desarrollo. Los alumnos van a formarse sabiendo que esa tecnología está a su alcance, y van a empezar a mirarla y cuando llegue el momento, cambiarla, compartirla, que las tecnologías de información son conocimientos para compartir, y que compartiendo crecemos todos. Ese es precisamente el mensaje que se quiere enseñar a los estudiantes, que compartir es la mejor forma de desarrollarse, de crecer y convertirse en médicos colaboradores. UNACAM es un instrumento de aprendizaje sumamente enriquecedor tanto para los estudiantes como para los mismos profesores, gracias a que el estudiante de medicina aprenderá de forma más dinámica, contextualizada y pedagógica para la resolución de problemas clínicos reales.

En resumen, la UNACAM:

• Promueve un aprendizaje por reforzamiento positivo con la interactividad que muestra el simulador.
• Mediante el empleo de simuladores, se logra captar la atención del alumno obteniendo un aprendizaje significativo.
• El educando conoce y trabajar en una realidad simulada.
• El alumno descubre y desarrollas sus habilidades clínicas permitiendo aumentar su capacidad de respuesta a las demandas médicas de un entorno intrahospitalario.
• Mediante el uso de los simuladores el alumno puede diferenciar y crear su propio aprendizaje a través de una experiencia directa.
• Disminuye la brecha entre la teoría académica y la práctica laboral ya que acerca al alumno a su futura realidad como médico, preparando para competencias laborales.
• Reduce riesgos ya que el alumno mediante la práctica en un simulador puede realizar actividades que de ejecutarse en la realidad un error puede ser fatal o costoso.
• El alumno, además de participar en la situación clínica, continuará procesando la información que se le proporcionó en una situación problemática compleja logrando una participación activa.
• Es una alternativa práctica que permite analizar problemas clínicos complejos.
• Permite que el estudiante de medicina experimente, tome decisiones con múltiples  argumentos, sin cambiar el sistema real.
• El estudiante de medicina pone en práctica la utilización del método científico, al efectuar actividades de investigación tratando de comprobar la hipótesis sobre algún tema en específico.

Productos que fracasen

Después de casi 7 años de la implementación de la UNACAM en el ámbito educativo institucional, de sus potencialidades, de la mejora metodológica que iba a provocar, de la revolución que suponía, de los beneficios de usarla por ser lo que se halla en el entorno hospitalario más cercano de los estudiantes de medicina, etc. resulta que no hay casi nadie en la institución que la use como debe. La mayoría de los docentes se dedican a realizar un consumo de materiales realizados por terceros y, el más avezado en ello, se atreve quizás a montar un PowerPoint en el interior de la unidad. Hay excepciones (demasiado pocas), claro está.

A mi entender, se puede fracasar en los objetivos del programa debido a múltiples causas:

• La existencia de una administración incapaz de mandar a sus docentes que cambien sus prácticas educativas. Ni incentivos, ni regulaciones que hagan posible que, en un período de tiempo razonable, el trabajo con simuladores se haga de la manera más eficaz posible (sin ser necesaria la completa sustitución).
• Acceso limitado. Aunque es un centro con una importante dotación de simuladores tiene limitaciones importantes
• Coordinadores de simulación inexpertos, se han delegado las funciones al pasante de servicio social, más dedicados a arreglar sus pendientes de titulación que a ser dinamizadores del uso de los simuladores en la unidad.
• Decisiones que hacen referencia a “aparatos” educativos y “simuladores” tomados desde despachos alejados de las aulas. No es raro ver como son muchos los postulantes que, sin haber intentado un solo día enfrentarse con la realidad de dicha unidad, planean la introducción de tal o cual dispositivo de formación.
• Falta de evaluaciones externas (e internas) sobre la eficacia de los diferentes métodos de trabajo en aula donde intervengan los simuladores.
• Falta de formación efectiva para el profesorado. Muchos docentes se forman en cursos que, por no llamar inútiles, los llamaríamos de cuestión absoluta. Unos cursos que, más allá de satisfacer la cantidad de horas necesarias para sexenios o concursos de traslados presentan una utilidad nula a la hora de aplicar lo aprendido en las aulas.
• Incapacidad de la realización de trabajos colaborativos donde se usen los simuladores.
• Inexistencia de una planificación adecuada en los centros para diseñar un proyecto de introducción del uso de simuladores más allá de papeles y más papeles enviados al Departamento de Educación respectivo, la mayoría copiados y no adaptados al entorno concreto, como justificación para recibir algún profesor de más o aumentar las reducciones horarias de sus plantillas.
• Motivación. No se motivó para que se dé un cambio metodológico donde el docente se viera obligado a adaptarse a la realidad del siglo XXI. El único premio que recibió el “innovador” es una carga de trabajo mayor que la de sus compañeros.
• Falta de tiempo para que el docente se adaptara a la metodología a esta nueva realidad. El docente, cada nueva reglamentación, disponía de menos tiempo para “cosas útiles” y tenía un aumento de carga burocrática en su tarea. Sin tiempo, era imposible la adaptación.

Como vemos, la mayoría de los factores que contribuyen al fracaso de dicho proyecto se deben al docente y a una mala gestión por parte de la Administración. Es por ello que, hasta que la Administración no se plantee potenciar el cambio (premiando o sancionando) y el docente no le encuentre utilidad real a modificar su metodología educativa incorporando el uso de simuladores, cualquier posible integración natural de las mismas en las aulas de nuestro entorno seguirá siendo pura utopía.

Conclusión

La globalización ha sido favorecida y va acompañada de un amplio y vigoroso desarrollo tecnológico, vinculado especialmente a las llamadas «nuevas tecnologías de información», pero no es la tecnología en sí. Lo cual, se confunde con mucha frecuencia, esta ha permitido, y muchas veces ha promovido, un cambio radical en la concepción de la «educación», asociada a expresiones como «la era de la información», «la supercarretera de la información», o «la sociedad del conocimiento».

La educación global requiere un cambio latitudinal importante en las personas a la par que una modificación de políticas en las instituciones, especialmente en las educativas y en los gobiernos; entre los beneficios más claros que los medios de comunicación aportan a la sociedad se encuentra el acceso a la cultura y la educación, los avances tecnológicos y los beneficios que comporta la era de la comunicación en que vivimos arrojan un balance y unas previsiones extraordinariamente positivas. Sin embargo, algunos expertos han incidido en que debe existir una relación entre la información que se suministra y la capacidad de asimilación de la misma por parte de las personas. Por ello, es conveniente una adecuada educación en el uso de estos poderosos medios.

Cada vez es preciso diseñar nuevos escenarios y acciones educativas, es decir, proponer una política educativa específica para el entorno cibernético. Aunque el derecho a la educación universal sólo se ha logrado plenamente en algunos países, pero no en México, motivo por el cual hay que seguir desarrollando acciones de alfabetización y educación en el entorno real. Este exige diseñar nuevas acciones educativas.

Debemos proponernos capacitar a las personas para que puedan actuar competentemente en los diversos escenarios de este entorno. Por ello, además de aplicar las nuevas tecnologías a la educación, hay que diseñar ante todo nuevos escenarios educativos donde los estudiantes puedan aprender a moverse e intervenir en un nuevo espacio.

El uso de simuladores es una de las nuevas unidades básicas de dicho sistema educativo, que incluye el diseño y la construcción de nuevos escenarios educativos, la elaboración de novedosos instrumentos educativos y la formación de educadores especializados en la enseñanza en el nuevo espacio social; el derecho a la educación universal tiene que ampliarse, porque los espacios sociales se han ampliado. Lo cierto es que el entorno tecnocrático emergente exige diseñar nuevas acciones educativas, complementarias a las ya existentes.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

·        Hernández-Hernández J. Cursos de RCP en la Escuela Superior de Medicina: Una forma de vincular el pregrado con el postgrado. Archivos de Medicina de Urgencia de México 2010;2 (2): 45-46.

·        Unidad de Adiestramiento y Certificación de Aptitudes Medicas. Disponible en: http://www.sepi.esm.ipn.mx/OfertaEducativa/EUMQ/ProgAcademico/Paginas/Apoyos-al-estudiante.aspx

·        Inaugura IPN Centro de Adiestramiento Médico, considerado como los más modernos de México. Febrero (2008). Disponible en: http://sabersinfin.blogspot.mx/2008/02/inaugura-ipn-centro-de-adiestramiento.html

·        Alumnos de Medicina del IPN realizan prácticas médicas con equipo de alta tecnología. Abril (2012). Disponible en: http://www.noticiasmvs.com/#!/noticias/alumnos-de-medicina-del-ipn-realizan-practicas-medicas-con-equipo-de-alta-tecnologia-127.html

Santiago López, Janaí. Proyecto UCAM. México: CEAAMER, 2015